El agua de riego es un factor clave, como todos los demás parámetros de nuestro cultivo
El agua recomendada para un cultivo hidropónico es la correctamente filtrada por un equipo de osmosis o similar
Si partimos de un agua de riego para la marihuana que no contiene nada, con un EC de 0,4 máximo, las plantas aprovecharán mejor los fertilizantes y producirán más.
Un equipo de osmosis doméstico no es caro, pero produce muy poca agua, unos 6 litros día. Si nos vamos a una osmosis grande, ya pasa a ser caro de narices. Puedes ver la tabla de media de consumo de agua
Con las instalaciones recomendadas en nuestra web, sacadas de las notas y gran experiencia de TitoMaría y de mí mismo, no necesitarás osmosis. Lo equipos de aire acondicionado, el humidificador y el deshumidificador te generarán suficiente agua osmotizada para tu hidropónico sin problemas.
Si nos has hecho caso y has seguido nuestro artículo resumen sobre como montar un hidropónico paso a paso, no te faltará agua de la buena en ningún momento. También es aconsejable mezclar algo de agua del grifo, que aunque sea dura, tiene algunas sales que el agua osmotizada no tiene.
Y en un apuro, en un badulaque pakistaní al lado de Cuenca vendían garrafas de 8 litros de agua a 72 céntimos de euro (2017). Comprar 10-15 garrafas para apañarnos unos días no parece mala inversión. Y con un 0,3 de EC.
La temperatura del agua
Como tenemos o deberíamos tener nuestros depósitos debajo de las bandejas de cultivo, la temperatura del agua estará a la temperatura de la sala, la cual debe ser de 22-26º. Es una muy buena temperatura para el agua. Los depósitos de trasiego y de reserva también deben de estar dentro de la sala.
Cómo oxigenar el agua de riego en hidroponía
Dado que nuestro sistema es de flujo y reflujo, inundamos y devolvemos el agua a los depósitos paródicamente. El agua que cae por los rebosaderos y la que retorna a través de la válvula de 3 vías, provocan la oxigenación del agua. No obstante, es buena idea ayudar con el aporte de oxígeno con una bomba secundaria. Esta nos ayudará a oxigenar el agua y a mezclar los nutrientes. Además, ese burbujeo es relajante, y si duermes cerca, dormirás mejor (es broma, pero cierto). Mira los esquemas hidráulicos.
Una bomba bien calculada recirculando el agua es mucho mejor que una bomba de aire y una piedra difusora, es más barata y además te sirve de recambio para las de riego, si llegara a fallar alguna.
El pH
Un mal ajuste del pH, durante tiempo prolongado, le hará daño a la planta si no es corregido. En hidropónico nos ponemos como meta mantenerlo en 6 siempre, no debiendo salir de la horquilla 5.8 -6.2. La teoría dice que el ciclo de cultivo debería empezar en 5.8 en crecimiento y acabar con 6.2 al cosechar. Ponte como meta ese 6.0 que te decimos y ya irás bien. Si alguna vez se desvía lo corriges con los productos adecuados de subir y bajar el pH que habrás comprado en el grow.
Tener que subir el pH no suele ser habitual, pero puede pasar con alguna marca de nutrientes.
La electro conductividad en el agua de riego
La EC de un líquido nos muestra la capacidad de transmisión eléctrica que tiene este líquido. Esta transmisión eléctrica es directamente proporcional a la cantidad de fertilizante añadido al agua. La EC en hidroponía de marihuana debería estar entre el 0.8 – 1.0 cuando son plántulas y hasta un 2.4 al final del ciclo de cultivo. Depende de cepas y sistemas, se podrá forzar un poco más a las plantas. Tienes mucha más información en nuestra sección sobre la alimentación de la marihuana.
Conclusiones
En resumen, el agua de riego la obtienes del aire acondicionado y deshumidificador, con un EC inicial menor a 0.4. La mueves continuamente con un poco de «chapoteo» para oxigenarla y mezclar los productos. Echas los nutrientes uno a uno al depósito, según fase del cultivo. Respeta las dosis del fabricante. Mides el EC que casi seguro te dará dentro de los márgenes. Fuerza un poco. Mide el pH y lo ajustas a 6 (5.8 – 6.2 según fase)
Esta es la forma productiva de tratar y de mantener el agua de riego.